Gabriel Peveroni, Los ojos de una ciudad china
Publicada originalmente en Montevideo por la editorial HUM, allá por 2016, Los ojos de una ciudad china ha logrado viajar en el tiempo. De hecho, podría decirse que ha invadido el pasado, como los terminators, en tanto ha retroformateado la obra anterior del uruguayo Gabriel Peveroni para producir algo nuevo, una macro-novela. En ese sentido, las últimas novelas de Peveroni (debe agregarse la segunda parte del «Proyecto Shanghai», Viajar no lleva a ningún sitio, publicada en 2019) son ante todo una horda de replicantes que bajan de la puerta de Tannhauser y del Hombro de Orión para tomar por asalto al Parque Jurásico de la literatura en tanto institución. El término replicante no es inocente: Los ojos de una ciudad china habla de clones, hace de un grupo de clones y clonadores el eje más claro de su trama y, por cierto, desafía el orden literario y sus formas sancionadas de (re)producción ofreciéndonos un texto pensable tant...