Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Mariana Enríquez

Nuestra parte de noche, Mariana Enríquez

  Comida.  La vida como aquello que crece y se multiplica: el cosmos como la gran circulación de la comida, el combustible de la replicación. Las plantas la producen a partir de la fuente más ubicua de energía sobre la tierra, con el añadido de oxígeno, dióxido de carbono y otros nutrientes; los animales, desconectados filogenéticamente del sol desde hace miles de millones de años, obtienen su energía comiéndose a las plantas o a otros animales que comieron plantas; los hongos descomponen plantas y animales y de ahí obtienen su energía. Todo suena muy didáctico, muy escolar. En realidad los animales están hechos también de bacterias, y es en conjunto con estas bacterias que las plantas o esos otros animales son devorados. Pero, además, cada célula animal guarda en su interior mitocondrias, encargadas de metabolizar, de asegurar ese crecimiento y esa energía para la reproducción: antiguas bacterias asimiladas, endo-simbiontes que se instalaron allí   dentro  cuando la...

Los peligros de fumar en la cama, Mariana Enríquez

Imagen
Procesos oscuros   Acaso sea una segunda lectura la mejor manera de valorar con más justicia Los peligros de fumar en la cama, el libro de cuentos que Mariana Enriquez publicó en 2009 y fue hace poco reeditado por Anagrama. Es decir: si se leyó primero el posterior y excelente Las cosas que perdimos en el fuego, se vuelve necesario superar la ansiedad generada por semejante precedente, y volver a leer Los peligros de fumar en la cama – o al menos algunos de sus cuentos– sin buscar de la brillantez de Las cosas… otra cosa que una prefiguración o anuncio, una estación más en el crecimiento de su autora, termina por dar resultado Con esto se quiere decir, entonces, tanto que Los peligros… no está en verdad a la altura de Las cosas… como que en sus mejores momentos, si se lo lee sin la mencionada ansiedad, ofrece una narrativa de interés y, por supuesto, formas de esa inquietud y extrañamiento (así como una mirada fresca a las convenciones del género y al influjo de Lovecra...

Las cosas que perdimos en el fuego, Mariana Enríquez

Imagen
Era un placer quemar Una primera mirada a Las cosas que perdimos en el fuego, el último libro de relatos de Mariana Enríquez (Buenos Aires, 1973), descubre dos cuentos que se perfilan con claridad y que, de paso, justifican con creces la compra del libro. Así, “La casa de Adela” y “Bajo el agua negra” parecen llamados a convertirse en nuevos clásicos del cuento argentino o rioplatense. Los dos son placenteramente incorporables al género “terror”   –desde el que es fácil leer la obra de Mariana Enríquez– y los dos ofrecen una clase magistral de narrativa.    “Bajo el agua negra” reescribe la ficción lovecraftiana en el contexto de las villas de Buenos Aires y la contaminación del Riachuelo, con mutantes, iglesias profanadas, culto a dioses oscuros y un cameo de Yogh Sothoth y las letanías de los fieles de Cthulhu. Es posible, digamos de paso, recorrer todas las colecciones recientes de ficción lovecraftiana ( Dark Wings of Cthulhu, New Cthulhu: The Re...