¡Alemania, Alemania!, Felipe Polleri
Pautas para Polleri Quizá valga la pena decir, como punto de partida, que la literatura de Felipe Polleri es o parece ser (o juega a ser o a presentarse como) algo parecido a un género. Una manera en que semejante afirmación podría dar paso a una reflexión interesante pasa por pensar que los géneros pautan un acuerdo con el lector, que le ofrecen una ecuación balanceada entre reiterar ciertas pautas consagradas y ensayar cierta novedad, que le dan al lector lo que el lector sabe que puede encontrar y que, de hecho, desea encontrar, que, también, la historia de un género determinado es también la de sus hitos, la de aquellas propuestas que han reformulado las reglas o tensado sus límites. Pensados desde estas coordenadas, los libros de Polleri resultan, sí, más o menos siempre iguales a sí mismos, siempre capaces de dar al lector –a los lectores y fans de Polleri– aquello que están esperando y que desean encontrar, a la vez que, de vez en cuando (Polleri, después de tod